El regreso a clases

“Empieza la vida… siempre empieza la vida”. Esta bella reflexión del poeta español Antonio Machado se relaciona muy bien con las vivencias que afrontaremos en la vida familiar en los próximos días, en lo referente a la iniciación del año escolar y todas las implicaciones que conlleva el regreso a clases.

Esto significa dejar atrás el tiempo de vacaciones con sus amplias variaciones en lo referente a los hábitos de alimentación, de sueño y actividades lúdicas, entre otras, con el consiguiente regreso a las actividades cotidianas y rutinarias de levantarse temprano, llegar a tiempo al colegio y cumplir con cada una de las actividades propias de la vida estudiantil.

Este retorno escolar implica también para los niños y niñas tensiones emocionales relacionadas con el hecho posible de llegar a un nuevo colegio o a un nuevo salón de clases, con profesores distintos y nuevos compañeros, entre otras vivencias.

De acuerdo con el acompañamiento inteligente y afectuoso que como padres debemos realizar en el contexto de una crianza humanizada, queremos compartir con nuestros lectores algunas recomendaciones de los expertos para un exitoso reingreso a las actividades estudiantiles:

• En las semanas previas, hable con su hijo(a) sobre sus expectativas acerca del colegio y explíquele con detalle cómo será su nueva rutina, que incluye la hora de levantarse, desayunar, el traslado a la institución y la iniciación de las respectivas actividades escolares. Procure resolver todas las inquietudes que surjan. Aplique los horarios para las rutinas descritas desde una semana antes de la iniciación de clases, por lo menos.
• Haga a su hijo(a) partícipe en las actividades de compra de libros, útiles y uniformes.
• Señale los aspectos positivos de iniciar un nuevo año escolar. Será divertido reencontrarse con sus amigos de antes y conocer otros nuevos.
• Es importante como padres estar preparados para afrontar las frecuentes manifestaciones de ansiedad de los hijos que suelen aparecer durante los primeros días de actividad escolar, tales como dolor de cabeza, dolor abdominal, irritabilidad y manifestaciones de apego excesivo.
• En estas, como en tantas otras manifestaciones de la crianza, una aproximación amorosa acompañada de una serena firmeza serán los mejores elementos para garantizar una adaptación exitosa a esta importante ocurrencia de la vida familiar.